Soros controla a un tercio de los diputados europeos y se reúne en secreto con Macron, por Hunor Both


Le ha valido la pena a George Soros dispensar millones de euros a la Unión europea, en particular para el lobbying de la Comisión europea, reunirse más de veinte veces con los dirigentes de la Comisión, y delegar en los lobbyistas permanentes de la Comisión y del Parlamento europeos. 

El especulador bursátil norteamericano ha logrado triplicar el apoyo del Parlamento europeo a la “protección de los valores democráticos”, en especial a las ONG del imperio Soros, en el marco presupuestario del período 2021-2027. Según el informe aprobado por 426 votos contra 152, la UE destinará 1,8 millardos de euros al nuevo programa europeo “Derechos y valores”, en lugar de los 642 millones inicialmente previstos. El otro colegislador europeo, el Consejo de Europa, que reúne a los gobiernos de los Estados miembros, todavía debe definir su posición sobre la creación y la financiación del programa de las ONG.

Soros mantiene reuniones regularmente con los miembros de la Comisión, del Parlamento y del Consejo, personalmente o por mediación de sus lobbyistas. Su filial Open Society European Policy Institute dispone de una acreditación permanente ante el Parlamento europeo. Sus 12 lobbyistas principales se reúnen medio centenar de veces al año con los representantes de las instituciones europeas. Sin embargo, la Comisión europea no publica ninguna información sobre estas actividades de lobbying. Ni sobre los millones de euros dispensados por Soros para su lobbying europeo. Sus principales destinos: la inmigración y el cerco a Hungría.

La misma fundación Open Society facilita una lista, bajo el epígrafe de “aliados fiables”, de los políticos y diputados europeos próximos o bajo la influencia directa de Soros (226 de 751 diputados europeos, un tercio, la mayor facción del parlamento). Entre los políticos, sus principales interlocutores son Jean-Claude Juncker, Frans Timmermans, Emmanuel Macron y el comisario de migraciones Dimitris Avramopoulos. Fuente: Origo