El autor del ensayo Los nombres
robados: Manipulación, falsificación y
rediseño de los topónimos vascos (Letras
Inquietas, 2019), explica cómo se ha ido cambiando la toponimia en su tierra. La modificación cognitiva que se produce en los habitantes se va logrando a
pequeños pero persistentes pasos, y así se consigue que la estupidez colectiva
se convierta en una realidad sociológicamente probada al cabo de una o dos generaciones. Leer artículo